Los niños no pueden ser ajenos

Los niños no pueden ser ajenos Fuera de las ventanas están los Últimos Tiempos. Nos demos cuenta o no. Lo creamos o no lo creamos. Pero tendremos que entrar en el día de mañana y ver los frutos de nuestra elección. Y mientras jugamos al juego de "creo - no creo", sopesando las probabilidades en la balanza de la consciencia o continuamos frívolamente construyendo castillos de arena frente al oleaje, la amarga verdad es que nuestros hijos... no saben nada de esto. Los niños no pueden ser ajenos Los niños no pueden ser ajenos Los niños no pueden ser ajenos