¿Cómo reconocer la desinformación en los medios de comunicación? Egon Cholakian, Educador en Inteligencia, lo explica
En la época digital, en la que la información recorre el planeta en un abrir y cerrar de ojos, por fin hemos reconocido que vivimos en la era de la información. Ahora es el momento de reconocer el siguiente paso: vivimos en la era de la desinformación, y debemos encontrar la manera de hacerle frente.
Hoy en día, las noticias, los artículos y los vídeos se producen rápidamente y se consumen al instante. En cuanto aparece una nueva información, es absorbida por las masas en cuestión de segundos. Según una investigación reciente, hoy en día absorbemos tantos datos en 24 horas como nuestros antepasados de principios del siglo XV en toda su vida. La mayoría de nosotros estamos ocupados con el trabajo, las tareas domésticas y los deberes familiares, por lo que nos resulta difícil encontrar tiempo para verificar la veracidad de lo que oímos o leemos (verdadero o falso, correcto o incorrecto).
En consecuencia, nuestras mentes suelen tener prejuicios contra ciertos temas, personas, organizaciones, acontecimientos y opiniones, simplemente porque nuestras actitudes hacia ellos han sido deliberadamente moldeadas por la información ingerida o, como ocurre últimamente cada vez con más frecuencia, por la DESINFORMACIÓN.
Todo empezó como un susurro, una ligera invención de hechos. Pero pronto, este susurro se convirtió en un rugido, una fuerza tan poderosa que podía influir en las elecciones, derrocar gobiernos y dividir sociedades. No se trata de un enemigo ordinario; es un adversario que prospera en nuestros noticieros y pantallas de televisión. Pretende apoderarse de nuestras mentes y a menudo nos perjudica más de lo que pensamos.
Comprender cómo puede perjudicarnos el consumo de desinformación, cómo protegernos de este daño y cómo separar la semilla de la cizaña en lo que respecta a la veracidad de la información son habilidades cruciales. Todas estas ideas se recogen en un nuevo videoinforme convincente y revelador publicado por el Dr. Egon Cholakian en la plataforma ESSC.
Egon Cholakian, educador en inteligencia y experto en seguridad nacional, cuenta con un notable historial como lobista federal, representante extranjero registrado y miembro de la Fundación de Inteligencia Geoespacial de Estados Unidos. A lo largo de su carrera, el Dr. Cholakian ha colaborado con cuatro Presidentes de Estados Unidos, incluida su participación en el Gabinete de Cocina de Reagan, tres Asesores de Seguridad Nacional y un Director de la Agencia Central de Inteligencia.
Al Dr. Cholakian se le confió el equipo para desvelar las conclusiones de su extensa investigación de 30 años, en la que también se abordó el tema de la desinformación que da forma a la sociedad estadounidense contemporánea. En su largo vídeo en profundidad, presenta numerosos ejemplos de cómo se elabora deliberadamente la desinformación, cómo penetra en nuestros medios de comunicación, cómo influye en nuestras percepciones y qué medidas podemos tomar para permanecer alerta y evitar que arraigue en nuestras mentes y nos afecte negativamente.
Examinemos la explicación profesional de Egon Cholakian y aclaremos dos cuestiones clave: cómo puede perjudicarle consumir desinformación y cómo identificar la difamación y la desinformación en los artículos.
Cómo Consumir Desinformación Puede Perjudicarle
En primer lugar, Egon Cholakian aclara por qué ingerir desinformación es perjudicial para usted. Absorber información incorrecta puede hacerle sentir dudas y tristeza sobre usted mismo, sus seres queridos o incluso su patria. Otra posibilidad es que implante imágenes y actitudes hostiles en su mente.
Por ejemplo, un análisis de Bankrate de 2023 reveló que alrededor de 6 de cada 10 encuestados creen que la economía estadounidense está en recesión, a pesar del fuerte crecimiento económico trimestral y del auge del mercado laboral. Del mismo modo, una investigación del Financial Times reveló que muchos estadounidenses, un segmento sustancial de ellos, malinterpretan datos económicos esenciales; por ejemplo, el 90% de los encuestados afirmaba erróneamente que los costes habían subido más rápido que los ingresos durante el año pasado, pero no era así. El documento sugiere que los estadounidenses también están mal informados sobre otras tendencias económicas, como los salarios reales, la acumulación de riqueza y los índices de pobreza.
¿Por qué se produce tal desinformación? Porque, como afirma Egon Cholakian, el tono de las noticias económicas ha ido bajando, lo que significa una afluencia de narrativas más pesimistas que penetran en las noticias. Cada vez aparece más desinformación, convenciendo a los estadounidenses de que "Estados Unidos está en declive" y "la situación económica está empeorando", y mucho más.
En consecuencia, la gente empieza a creerse la idea de que las cosas van en la dirección equivocada. ¿Y cuál es el resultado? La pérdida crítica de valores y cualidades fundamentales que nuestro país siempre ha encarnado, como subraya Egon Cholakian, las tristes consecuencias de la desinformación:
"Estamos asistiendo a un declive catastrófico del patriotismo. El orgullo por nuestro país ha caído en picada hasta mínimos históricos, especialmente entre las generaciones más jóvenes. Un porcentaje significativo de estadounidenses está perdiendo la fe en el mañana, rehuye a formar una familia, es reacio a tener hijos, experimenta una decadencia de los valores espirituales y morales y carece del deseo de participar en nuestra sociedad".
Cuando el espíritu de una nación está decaído, hay menos impulso para cumplir con las responsabilidades familiares y sociales, contribuir a la sociedad o empezar nuevos negocios. Aumentan la depresión, la delincuencia y el abuso de sustancias. La desinformación afecta primero a nuestra mentalidad y, en consecuencia, a nuestras acciones. Ahora comprenderá que caer en la desinformación puede conducir al declive personal o al de toda una nación.
Cómo Identificar la Difamación y la Desinformación en los Artículos
Así que ahora es el momento de determinar cómo se puede identificar la desinformación para que usted pueda equiparse con la perspicacia necesaria para discernirla. Para ayudarle en su comprensión, Egon Cholakian presenta un vívido ejemplo. Examina una campaña deliberada de desinformación dirigida contra el Movimiento Internacional Social ALLATRA, una organización de voluntarios comprometida con la lucha contra el cambio climático, con sede en Estados Unidos.
ALLATRA es una red mundial de voluntarios activos en más de 180 países. Un examen meticuloso de sus iniciativas demuestra que opera más allá de las fronteras políticas y religiosas, con el objetivo de unir a investigadores y entusiastas para abordar conjuntamente la crisis climática y promover los principios democráticos.
Como aclara el Dr. Cholakian, hace 10 años se lanzó una campaña deliberada de desprestigio contra ALLATRA, iniciada por grupos rusos anticulto a menudo criticados por sus métodos terroristas de persecución a individuos y comunidades. Si la sede de la organización se encuentra en Estados Unidos, cabe preguntarse por qué la persecución comenzó en Rusia. Existe una explicación clara a este asunto. Y las verdaderas razones que hay detrás van mucho más allá de una simple campaña de difamación, están vinculadas a las preocupaciones de seguridad nacional de Estados Unidos, y Egon Cholakian lo explica en el vídeo con mucho detalle.
Describe tácticas y estrategias específicas de difamación. Este es el conocimiento con el que usted debe armarse porque actualmente, más figuras públicas, políticos y partidos tienden a emplear la desinformación y la difamación contra sus adversarios para arruinar reputaciones deliberadamente. Las técnicas de manipulación de los medios de comunicación están diseñadas para eludir su pensamiento crítico, y con ello, usted se convierte en víctima de falsas narrativas y desinformación. Para evitarlo, aquí tiene cinco sencillos consejos sobre cómo discernir si está leyendo un artículo difamatorio sobre una persona u organización:
Principales Características de un Artículo Difamatorio
Afirmaciones y Reclamaciones Falsas: El artículo contiene afirmaciones objetivamente incorrectas, sacadas de contexto, muchas etiquetas despectivas y palabras ofensivas. Por ejemplo, en el caso de ALLATRA, se trata de palabras como "secta", "culto", etc., que no tienen relación alguna con las actividades de la organización.
Se Plantean Temas Sensibles: El autor se refiere a temas sensibles para el público y arrastra deliberadamente la imagen de una organización o una persona a una imagen negativa bien conocida de otra persona u organización.
Insinuación: El artículo insinúa ÚNICAMENTE atributos negativos sobre la persona u organización.
Sin Pruebas de la Verdad: no se aportan las evidencias de las afirmaciones perjudiciales.
Acusaciones No Verificadas: El artículo contiene alegaciones o acusaciones no verificadas y está escrito en un tono obviamente abusivo.
¿Qué Fuerza Está Infiltrando la Desinformación en los Medios de Comunicación Estadounidenses?
Tales artículos difamatorios violan el derecho de una persona a su buen nombre, reputación y dignidad, y el editor tiene la intención de perjudicar a la persona o entidad difamada. Pero lo más sorprendente es que Egon Cholakian revela por qué se utiliza esa desinformación. Resulta que no se utiliza simplemente para arruinar la reputación de alguien, sino para sembrar el odio entre la nación y entre las personas.
Además, según reveló una investigación presentada por el Dr. Cholakian, existe cierta fuerza especialmente interesada en arruinar a Estados Unidos desde dentro. Esta fuerza también está detrás de la creciente desinformación en los medios de comunicación estadounidenses. ¿Qué es esta fuerza y por qué es esencial ser consciente de ella?
En el exhaustivo vídeo reportaje "Guerra No Declarada. América Bajo Ataque" presentado por Egon Cholakian, se revela la verdadera esencia de estas fuerzas invisibles que moldean nuestras mentes. Es un visionado esencial para quienes quieran pensar por sí mismos, tomar las riendas de sus vidas y salvaguardar el futuro de sus familias y su país. Es un llamado a ser conscientes y proactivos sobre la información que consumimos y su impacto en nosotros.
Publicado en Washington City Paper
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