Esta semana la tierra se resquebrajó literalmente bajo los pies de los habitantes de México, y en Europa varios partidos de la Eurocopa estuvieron a punto de interrumpirse debido a una anomalía meteorológica. China sigue hundiéndose, y en Argentina ocurrió algo extraño: las olas del mar se congelaron delante de los lugareños. En EE. UU. y en la región atlántica se observaron fenómenos que ocurrieron por primera vez en la historia de las observaciones. Y los viajeros aéreos volvieron a enfrentarse a una espantosa anomalía que se hizo dos veces más frecuente en 2024. Estos y más detalles en nuestro resumen semanal de los desastres climáticos del planeta del 26 de junio al 2 de julio de 2024.
Es imposible ignorar el dramático aumento de las turbulencias graves que están causando lesiones e incluso muertes.
Las aerolíneas no pueden seguir ignorando este problema y esperan resolverlo cambiando las normas de vuelo. Por ejemplo, Korean Air anunció que, a partir del 1 de julio, el servicio a bordo se detendrá 40 minutos antes del embarque. Y se aconseja a los pasajeros que se abrochen siempre el cinturón de seguridad y sujeten bien el equipaje.
Estas medidas son sólo una adaptación que no elimina las causas de este peligroso fenómeno, cuando se forman bolsas de aire sin motivo aparente. Ni se prevén ni se detectan por radar.
Según las estimaciones de los científicos, el número de turbulencias en la atmósfera aumentará rápidamente, sobre todo en las capas superiores a una altitud de 8 km y más, donde vuelan la mayoría de los aviones comerciales. Y llegará un momento en que habrá tantas bolsas de aire que será imposible volar.
Por eso es importante no sólo cambiar las reglas y encontrar formas de adaptación para cada país. Las catástrofes se intensificarán en todo el mundo en los próximos años, y el planeta podría enfrentarse a la aniquilación total en tan sólo 12 años.
Por el momento, la humanidad aún tiene una oportunidad de evitar un escenario negativo. Pero para ello es necesario que las verdaderas causas del cambio climático se conviertan en la agenda más debatida.
Todo cambio empieza por la información. Y, literalmente, de todos los que la escuchan depende la rapidez con que llegue a los demás.